Más que piedras!
Jacob estaba huyendo de Esaú, su hermano.
¿Las razones? Jacob fingió ser Esaú robándole un derecho por ser el primogénito. Había deshonrado a su familia, engañado a su padre, usurpado un lugar. Esaú había prometido matarle… STOP!
dijiste.. ¡¿Asesinarle?! Sí.
Al parecer Jacob ya había rebalsado el vaso de Esaú desde hace mucho tiempo. Él estaba dispuesto a manchar sus manos con sangre, ya no toleraría más su presencia en la Tierra. Él acabaría con Jacob.
Jacob a un costado del camino se detuvo. No había prácticamente muchas alternativas, él sabía que Esaú tarde o temprano le encontraría, y por sobretodo, Jacob no podía negar que SÍ, él merecía morir, él merecía un castigo por su gran daño.
Estando allí, bajo un manto de estrellas, miró a su alrededor… buscó, buscó, y finalmente encontró lo MEJOR que había: Una roca sería su almohada.
Cómodo, suave, blando… JAMÁS! pero, al parecer estaba demasiado cansado para notarlo. Se durmió.
Tuvo un sueño… un GRAN sueño (eso será tema para otra nota…)
Al despertar, algo había sucedido con él…
Tomó la piedra, su EXCELENTE almohada, y la usó como estela… como PIEDRA SAGRADA, derramando aceite sobre ella, y declaró las siguientes palabras:
«.. SI Dios me acompaña, y me protege en este viaje que estoy haciendo..
y SI me da alimento y ropa para vestirme…
y SI regreso sano y salvo a la casa de mi padre… ENTONCES el Señor será mi Dios..» (Lo puedes leer en Génesis 28:20)
Como dirían en mi país… Este Jacob se las trae!
Si logras distinguir los enunciados, notarás que fueron ABSOLUTAMENTE condicionales!!
Jacob se atrevió a PEDIR ciertas cosas, como si fuese a firmar un contrato: «Estas son las condiciones, si las aceptas y otorgas, yo… firmaré. Punto.»
Claro… esas no fueron sus palabras, pero es algo muy similar.
¿Qué sucedió..? – Te preguntas
El tiempo pasó, Jacob siguió con vida junto a su familia, tuvo el necesario alimento y cuidado, regresó a su hogar con el perdón de su hermano Esaú.
Y un día, regresó a ese lugar especial, vio su CÓMODA ALMOHADA en el mismo sito en donde la había dejado.
Sin embargo, no era simplemente una piedra en el camino…
Era símbolo de PACTO
Era símbolo de FIDELIDAD DE DIOS
Era símbolo de FE
Era símbolo de GRACIA SOBREABUNDANTE
Era símbolo de VIDA…
Quizás en la vida pueden existir «Piedras» que aparentemente no son lo suficientemente buenas para ti… es decir, no es la respuesta que esperabas, no es el camino que añorabas, ni el sueño de tu vida. Pero continúas creyendo en Dios, o tal vez solo conservas una mínima esperanza antes de morir, antes de perder lo que amas… sientes que estás a un paso de que todo se desmorone y literalmente vengan a buscar tu cabeza.
Efesios 2:19, 20 dice: «Todos los de la Iglesia son como un edificio construido sobre la enseñanza de los apóstoles y los profetas, y en ese edificio Jesucristo es la PIEDRA PRINCIPAL»
Él es símbolo de PACTO ETERNO que Dios hizo contigo a través de Su muerte!
Él es símbolo de FIDELIDAD de Dios hacia tu vida!
Él es símbolo de dónde debes depositar tu FE!
Él es símbolo de GRACIA SOBREABUNDANTE, porque te amó aun cuando le habías fallado y al igual que Jacob merecías un castigo por tus faltas!
Él es símbolo de VIDA, de VIDA ABUNDANTE y ETERNA!
La piedra de Jacob… y Jesús en tu vida: MUCHO Más que piedras.-